Caso clínico:
A.R. es un paciente de 46 años, con el diagnóstico de artritis reumatoide, no padece ninguna otra patología. Se le administraron diferentes pruebas de evaluación ocupacional, entre ellas el Índice de Barthel, cuya puntuación fue de 90/100. Desde un punto de vista cualitativo, se observa que el paciente puede hacer gran parte de las actividades de forma independiente, pero con dolor y más lentamente de lo esperable para su edad. Utiliza inadecuadamente los cubiertos, tiene dificultad para abotonarse, subir cremalleras, ponerse la ropa interior y calzarse. Puede bañarse sólo pero, le cuesta coger el champú, gel, etc…, Igualmente, se realizó una valoración de los gestos de los miembros superiores encontrando que presentaba una limitación en todos los arcos de movimiento de hombros y en extensión completa de codos. También muestra disminución de la movilidad en ambas manos, observándose edema. El paciente indica que siente dolor al tacto y movimiento y que tiene rigidez a primera hora de la mañana.
Además, tiene deformidad en cuello de cisne en el tercer, cuarto y quinto dedo de la mano derecha, acompañado de desviación cubital con dedos en ráfaga cubital en ambas manos, estando más afectada la derecha, al ser el paciente diestro y utilizar con más frecuencia esa mano.
Muestro el link de la presentación en Power Point del caso mostrado:
En él podemos encontrar una breve introducción del caso y de la enfermedad, artritis reumatoide. También el planteamiento de las diferentes terapias según la finalidad que busquemos.
Por un lado, destaco la terapia física en la cual podría destacarse el ejercicio físico. Ahora bien, puede plantearse la siguiente pregunta: ¿Está indicado el ejercicio físico en pacientes con artritis reumatoide?, la repuesta es sí, sólo lo limita la condición en la que se encuentra el paciente.
Algunos ejemplos más comunes que podemos aplicar es la hidroterapia, yoga, masajes con hielo, waterpolo, ejercicios isométricos, entre otros ejercicios aeróbicos, a la vez que trabajoz manuales como la arcilla, pintura, siempre todas estas actividades que estén moduladas y con significado para el usuario. En definitiva, terapia con el fin de evitar deformaciones y entrenar o reeducar al paciente a realizar las actividades de la vida diaria de una forma adecuada.
Hay que tener en cuenta que antes de trabajar con las articulaciones o ponerlar en funcionamiento hay que realizar unos movimientos pasivos previos y relajación, antes que aplicar calor, ya que estos pacientes toleran mal el calor directamente.
Por otro lado, la terapia cognitiva, la cual tiene como finalidad contrarrestar el dolor o minimizarlo, al igual que puede presentar depresión el paciente. Esta depresión suele deberse a la pérdida de rol, lo que supone la pérdida de su empleo y ocuparse de la casa. Se puede intervenir con la utilización de estrategias personales de afrontamiento. El paciente llega a una etapa donde se pregunta: ''¿qué he sido?, ¿qué soy ahora? y ¿qué voy a ser?'', en lo cual es nuestro trabajo dotar de significado su vida actual.
Está indicado terapia de grupo, es decir, asistir a reuniones, colectivos que presenten la misma patología que él. En estas terapias cada usuario cuenta su experiencia, cómo convive con la artritis, de tal manera que se sienta identificado nuestro usuario con los demás casos. Existen asociaciones que crean actividades y talleres para personas con artritis reumatoide, por ejemplo em la Asociación Madrileña de Pacientes con Artritis Reumatoide: http://www.amapar.org/
La mayoría de las terapias físicas también, a largo plazo sobre todo, tienen una finalidad cognitiva, porque como ya sabemos el ejercicio físico mejora nuestra salud mental. Otro tema que deberíamos abordar que se considera un tema tabú, aún en la actualidad que nos encontramos, es la sexualidad de estos pacientes. Hay pocos usuarios que se atreven a sacar dicho tema, por lo que en muchas asociaciones colocan trípticos para el que se interese lo vea. En estos trípticos se pueden encontrar consejos sobre posturas cómodas, evitando el dolor.
Para personas con artritis reumatoide con deformidad se les recomiendan ayudas técnicas, como el uso de férulas de reposo para la mano y para los dedos con cuello de cisne las que se muestran en el lateral
Me gustaría también aportar el siguiente artículo sobre la hidroterapia para estos pacientes, la cual se indica para el dolor articular, http://www.elsiglodetorreon.com.mx/noticia/105061.la-hidroterapia-alivia-dolores-reumaticos.html
Publicado: 08/12/2011